Ubicación del router en la casa
A la hora de elegir el lugar en el que vas a ubicar el router, lo más aconsejable es que lo hagas en punto central para que la conexión WIFI llegue a todos lados; además, es importante que no haya muchos obstáculos a su alrededor. Por ejemplo, no es aconsejable colocarlo en la parte baja de una estantería o dentro de un armario. Imprescindible que el entorno del router esté despejado para que pueda emitir bien su señal.
Actualización del firmware
El router, de la misma manera que cualquier otro gadget o dispositivo, recibe actualizaciones por parte del fabricante; así que, si quieres mejorar la señal WIFI de tu casa, es fundamental que lo tengas siempre actualizado con el último firmware.
Puedes comprobar si tu router cuenta o no con la última actualización desde la propia página de configuración del router; depende de la marca y del modelo, pero empieza siempre con las cifras 192.168 y le siguen otros seis números.
Desde la propia página de configuración también puedes modificar el canal o la frecuencia que utiliza tu router para transmitir la señal WIFI. Generalmente, el canal más habitual es el 6 y la frecuencia, 2,4 GHz.
Interferencias con otros dispositivos
Asegúrate de que no hay ningún otro dispositivo que interfiera en la señal de tu router. En bloques de apartamentos no es extraño encontrar routers que chocan con los routers de otros vecinos; también puede darse el caso de que choquen con otros aparatos, aunque es menos habitual, como teléfonos inalámbricos o microondas.
La mejor manera de evitarlo es tener un router de doble o triple banda. O, la opción más barata; mover tu router sin alejarlo demasiado del punto central de la vivienda, hasta encontrar el punto exacto en el que no choca con ningún otro elemento.
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